“Señor, rompe las cadenas que me sujetan a mí mismo; libérame para ser tu esclavo alegre; es decir, para ser el lavador alegre de pies de quien necesite que le laven los pies, que le cocinen la cena, que le pasen por alto sus defectos, que le feliciten por su trabajo, que le perdonen su fracaso, que le consuelen sus penas o que le cosan un botón. Que no me imagine que mi amor por ti es muy grande si no estoy dispuesto a hacer por algún otro ser humano algo muy pequeño”.
~Elisabeth Elliot
“Lord, break the chains that hold me to myself; free me to be Your happy slave — that is to be the happy foot washer of anyone who needs his feet washed, his supper cooked, his faults overlooked, his work commended, his failure forgiven, his griefs consoled, or a button sewed on. Let me not imagine my love for You is very great if I am unwilling to do for a human being something very small”.
~Elisabeth Elliot
