#CopaAmérica

Es increíble que insistamos como seres humanos que estamos mejorando cuando la evidencia al contrario es abrumadora en la vida sobre este planeta.

#Charleston

#CopaAmérica

#France

#USA

No es solo que nos auto-deludimos; es que estamos más que dispuestos a hacerlo. Pero, cada vez que lo hacemos, nos engañamos. Y cada vez, demostramos que llevamos la hipocresía bien arraigada en el fondo de nuestro corazón.

Por un lado, decimos preocuparnos como sociedad por el “bullying” en las escuelas, pero por otro lado no tomamos acciones concretas (¡o consistentes!) en contra de las más denigrantes acciones que violan normas de “fair play” en las canchas de nuestra propia Copa América. Fracasamos en el foro más público para nuestro continente: el fútbol internacional. Y las evidencias se registran en video y en foto para que el mundo entero las pueda analizar convenientemente.

Nuestros niños observan nuestras reacciones. Siempre están estudiando y aprendiendo del mundo que los rodea. Y, por ser muchísimo más inteligentes de lo que a menudo queramos reconocer, aprenden más por lo que vivimos que por lo que decimos (pero en realidad no practicamos). En nuestro descuido y nuestra pereza, les estamos dando un mensaje clarísimo: En el foro más público (el de deportistas profesionales), no hay consecuencias reales por denigrar a otras personas. Y nuestros chicos lógicamente pueden concluir: Tal vez yo también me pueda hacer el vivo y escapar. Y nosotros, los adultos, nos rascamos la cabeza y nos preguntamos por qué el mundo va de mal en peor...

Y este es solo uno de los temas en nuestro triste mundo actual. Apunto a este tema porque es el que más me llega, porque ocurre en el mundo que más de cerca me rodea y porque es el que más inmediatamente afecta a mis pequeños.

Tenemos que actuar. Por eso, estoy actuando al escribir esto. Y también estoy aprovechando la oportunidad para redimirla, para derramar sobre esta polémica el foco de la luz más poderosa. Corro para admitir que aunque hay medidas menores que se pueden (¡y que se deben!) tomar, finalmente la verdadera respuesta (la única duradera) está en la última Verdad, la más grande Realidad.